¿Sabes que eres una de las personas más envidiadas en este momento? Sí sí. ¿y todavía te preguntas por qué? Porque si estás leyendo este artículo es que tienes piscina o estás pensando en poner una en tu casa. No importa si es grande o pequeña, redonda o cuadrada solo el hecho de pronunciar ‘mi piscina’ es motivo para que los demás no muramos de envidia. ¿o no?
Pero dejando a un lado la suerte que tienes y con la esperanza de que nos invites a tu maravillosa piscina vamos a darte unos consejos para que la puedas poner a punto y mantenerla todo el verano.
Para disfrutarla hay que cuidarla
Tener una piscina en casa es un privilegio, pero también un trabajo. Algo que nadie te dice, ya que cuando vas a comprar la piscina todo son cosas maravillosas. Pero la realidad es otra y la verdad es que una piscina requiere un mantenimiento diario durante el verano. Y seguro que te estás preguntado que tareas son las que debes realizar ¿verdad? Bien, vamos a verlas
Quita todo lo que flota:
Es habitual que cada mañana encuentres insectos, hojas o ramas (u otros elementos no identificados) flotando en el agua. Es importante quitarlos aunque no vayas a bañarte, porque pueden obstruir los filtros y estropearlos. Para ello, hay recogedores especiales, llamados recogehojas , que te facilitarás el trabajo y que con un sola pasada tendrás la piscina lista para zambullirte.
Rascar un poquito:
Otra de las labores diarias que tienes que llevar a cabo para el mantenimiento de piscinas es un poco menos agradable y más laboriosa. Aunque te parezca mentira es importante que cada día quites la suciedad adherida a paredes y al fondo.
Es importante por tres razones: Primero porque aumentarás la vida y el buen funcionamiento de los filtros,. Segundo porque mejorarás la calidad del agua sin necesidad de echar demasiados productos. La tercera razón tiene que ver con si quieres seguir siendo la persona más envidiada del barrio. Y es que solo así la piscina te durará muchos pero que muchos años.
Tranquilo no es lo que piensas,. No vas a tener que meterte cada mañana con el tubo, las gafas y un rascador a bucear para limpiar la piscina. Hay cepillos con alargadores que te facilitarán la tarea.
Controlar la calidad del agua:
Esta última tarea no es tan laboriosa ni fastidiosa, ya que solo tendrás que comprobar que el valor del pH del agua se sitúe entre 2 y 7.6 de pH.
Y si acabas de estrenar tu pequeña joya, seguro que te preguntas como se mide la calidad del agua si tú no tienes ni idea de ciencias hidrológicas. Que no cunda el pánico, es más fácil de lo que parece.
Existen unos Kits especiales para piscinas que nos facilitan la labor. Únicamente tendrás que coger un poco de agua de la piscina en un vaso medidor y echar unas gotas de pastilla reactiva. Agita durante unos segundos y verás que el agua cambia de color.
Ahora solo tienes que comparar ese color con el de la muestra de control. Recuerda que la medida correcta debe situarse 7.2/7.6. Si, tras la medida observas que los valores no son los adecuados, debes usar un corrector para mejorar el nivel pH. ¿Por qué? Porqué esto quiere decir que el agua se ha alcalinizado y esto puede dañar nuestra piel y también las paredes de la piscina
Lo que si te cuentan pero no te dicen cómo hacerlo
Además de las labores diarias, hay algunas otras tareas que debes llevar a cabo para el mantenimiento de piscinas que no son tas asiduas pero que también se deben hacer. Se trata de tareas semanales.
Sigue leyendo y te contamos cuáles son y cómo debes hacerlas
Cloro
El cloro es necesario aunque no te guste demasiado. Su labor es eliminar los microorganismos que hay en el agua. Estos son los causantes de que el agua coja ese color verdoso que te quitan las ganas de bañarte. Para controlarlo y que el agua tenga el cloro que necesita ni más ni menos puedes utilizar el dosificador de cloro o bien introducir las pastillas de cloro en los skimers para que vayan disolviéndose. Lo mejor es que lo apliques en horas en las que no te vas a bañar.
Floculante
Este producto te ayudará a recoger la suciedad disuelta en el agua con mayor facilidad.
Depuradora
Las partículas de suciedad que llegan a los filtros haciendo que la depuradora se obstruya, incluso se estropee. Por eso, una vez a la semana es conveniente realizar un lavado contracorriente de la depuradora para expulsar la suciedad
Quizá te has agobiado un poco con todas las actividades que hay que realizar pero ya verás que en el momento en que metas un pie en el agua todo merecerá la pena. Además, piensa que si no haces estas pequeñas labores que no te llevarán demasiado tiempo, en el momento que quieras utilizar la piscina tendrás que limpiar tanto que no te quedará tiempo para el baño.
Y, sobre todo, cuando sepas que eres la envidia del barrio cada mañana te levantarás con gusto a limpiar tu piscina ¿o no?