Parece que este año el verano ha decidido pasar de largo en Euskadi. Es verdad que los veranos aquí nunca han sido súper esplendidos, y que julio y agosto hemos acabado siempre con tortícolis de tanto mirar al cielo rezando para que no lloviese. Y es verdad que aquí los días de sol siempre han sido más bien escasos.
¿Pero este año? Este año el verano no asoma ni siquiera para recordarnos que el sol sigue ahí que no se ha desintegrado. No hay verano ¿ o sí? No podemos hacer que el verano y el sol lleguen a nuestras calles y ciudad, pero sí podemos hacer que el verano llegue a nuestra casa ¿Cómo? gracias a la decoración.
Con estos 7 trucos de decoración, el verano llegará a tu casa
- Di adiós a la oscuridad
Fuera todo aquello que tengas de color negro, marrón, gris… Retira todo lo oscuro incluso los muebles que no sean esenciales. Y qué decir de mantas de lana o sábanas de franela, edredones, etc. Todo fuera. Es verdad que el tiempo no ayuda pero siempre puedes colocar un manta de hilo o tela fina que te cubra cuando estás en el sofá o en la cama
- Colores veraniegos
Llena tu casa de colores veraniegos. Coloca fundas de colores a las almohadas, las toallas del baño que sean de colores vivos y alegres, si la mesa es oscura compra un mantel alegre y si el sofá también es oscuro haz lo mismo y coloca una funda.
En los dormitorios, coloca sábanas con colores alegres y veraniegos. Si te gustan los estampados estás en la época idónea para decorar con ellos tu habitación. Utiliza estampados de flores, sobre todo, amapolas o margaritas, u otros temas veraniegos como las frutas, fauna, sol.
Si no eres de estampados ni te atreves con los colores vivos, puedes optar por los colores pastel
- Obsesiónate con el blanco
El blanco es sin duda el color del verano. No entiende de modas ni del paso del tiempo. El blanco es y será siempre el color por excelencia de esta época. Así que introdúcelo en tu hogar, decora en blanco, víste tu caso con blanco. No solo traerá luz y frescura, sino que además vestirá de elegancia tu hogar
- Que tu casa parezca un jardín
Las plantas dan vida y color a tu casa. Coloca flores de temporada (incluso pueden ser campestres) por toda la casa, no solo en el salón. También en la cocina, en el baño, etc. por ejemplo, en la cocina puedes colocar un jarrón con hierbas que sirvan para cocinar como el romero, menta, perejil, etc.
También puedes colocar un ramo de flores colorido en la mesa. Seguro que el olor perfumado y la alegría que desprenden te hará salir de casa llena de energía aunque el tiempo fuera no acompañe.
Para el dormitorio, por sus parte, van muy bien la lavanda y las hierbas aromáticas
- Tu propio huerto urbano
A falta de jardín o terraza grande lo mejor es un huerto urbano. No solo podrás cultivar tu misma tus propias verduras y frutas, sino que además darás un toque de lo más veraniego a tu hogar. Si quieres disponer en tu propio hogar de verduras y plantas para cocinar, no te pierdas el artículo cómo crear tu propio Huerto urbano de nuestro blog.
- Deja entrar el mar en tu hogar
Tenemos el privilegio de vivir muy cerca del mar. Pero es verdad que muchas veces el tiempo no acompaña para ir a la playa. Pero ¿y si traemos la playa a nuestra casa? Date un paseo por cualquiera de las playas que tienes cerca y recoge conchas y arena. Échale imaginación y crea elementos decorativos. Haz una vela con conchas, un tarrón de arena, un marco de fotos con elementos del mar, etc.
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- Que la claridad inunde tu hogar
No importa que el sol no asome ni por despiste. No importa que los días sean nublados. En verano siempre hay una claridad especial y debemos dejarla entrar. Sube las persianas, corre las cortinas y abre las ventanas. Deja que tu casa se ilumine con luz natural.
Ahora ya no te importará tanto que el tiempo no acompañe. Aunque de puertas para fuera parezca invierno, en tu hogar será verano y tú te levantarás cada día con la energía y la alegría del verano